Mañanas mexicanas

Ser niño en México es ser amigo del ardiente sol que nos acompaña en cada etapa infantil;siempre le recordamos en camino a la escuela en las primaveras más secas ,no hay nada más pesado que ardientes rayos de sol cubran nuestra sombra y guien nuestros pasos sobretodo cuando caminamos polvorientos caminos carentes de toda sombra natural y artificial.Pero cuándo estamos en la distancía  siempre recordamos esas mismas imagenes infantiles:sentados bajo sombrios árboles o recargados sobre empedradas laderas de cerros adornados con cactus y hormigas.